Bloqueo a las redes sociales de Trump: ¿el poderío tecnológico manejando los hilos del mundo?

Facebook, Instagram y Twitter bloquean las cuentas de Donald Trump ¿Cómo afecta a la circulación de la información en el mundo? ¿El control de la democracia en manos de CEO’s de las redes sociales?

Medios de ComunicaciónMPBMPB

hand-784077_1920

Las empresas responsables de las principales redes sociales decidieron bloquear las cuentas oficiales de Trump tras la toma del Capitolio llevada a cabo por manifestantes de ultra derecha, defensores del saliente mandatario. El hecho ocurrió al momento en que se intentaba definir el cambio de mando, buscando la dilación de la toma de posesión del actual presidente Joe Biden.

Parados desde el extremo sur del continente americano tiene poco de novedoso este hecho. Por estos lados, cuando no fueron aliadas estratégicas para un desarrollo local, las empresas que detentaban el poder económico global siempre se encargaron de direccionar los destinos de los estados en función de su rédito y crecimiento. Con los hilos de las marionetas que presidian cada país en sus manos, hicieron y deshicieron a su antojo.

En un artículo publicado en el portal de noticias RT, la periodista y experta política estadounidense Helen Buyniski, señala que la decisión tomada por algunos gigantes tecnológicos, tras la toma del Capitolio en Estados Unidos, demuestra que ya son “más poderosos que cualquier Gobierno”.

Asombra el hecho de que la “víctima” sea un ex presidente de la tan mentada democracia estadounidense y quizás eso es lo que lleva a muchos a señalar el poderío de ciertas empresas por sobre los estados. O quizás lo novedoso de que empresas tecnológicas (sobre las que hoy se mueve el mundo) tomen la decisión de censurar, disfrazando la acción como defensa a la democracia. 

Cuesta ver al ex Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ocupando el lugar de la víctima en este suceso. Todo se asemeja al fin de un contrato de colaboración entre ambas partes. Fin de un negocio en el que tanto Trump como las empresas responsables de Facebook, Instagram, Twitter y cuanta red social le haya sido bloqueada, resultaban favorecidos. 

Lo que cuesta también digerir es que las razones del bloqueo sean la utilización que Trump hizo de sus redes sociales para fogonear la toma del Capitolio. En su historia como presidente las usó de cotidiano como tribuna para infundir un discurso violento, desde la institucionalidad de su cargo.

El CEO de Facebook e Instagram, Mark Zuckerberg comunicó la decisión de ambas empresas señalando que mantendrán bloquedas las cuentas de Donald Trump de “manera indefinida” con el objetivo de evitar las “incitaciones a una insurrección violenta contra un gobierno elegido democráticamente”, en referencia al de Joe Biden. 

Zuckerberg señaló:

Los riesgos de permitir que el presidente continúe utilizando nuestro servicio durante este período son simplemente demasiado grandes. 

Para la periodista Helen Buyniski el estado dirigido por empresas "con políticos que actúan como simples testaferros" equivale "al mismo fascismo al que afirman oponerse". La analista agrega que gracias a "un control férreo de la narrativa política y la represión con mano dura de cualquier voz disidente influyente", estas empresas "increíblemente ricas" y sus socios en el 'establishment' de los medios han logrado "hacer añicos con éxito lo que quedaba del proceso democrático de EE.UU.".

Medios de comunicación y redes sociales

Los medios todos se hicieron eco del bloqueo a las cuentas de Donald Trump, la noticia corrió como reguero de pólvora por todo el mundo. En muchos casos el accionar de Facebook, Twitter y demás redes sociales fue incluso celebrado por opositores a Trump y aquellos que lo señalan como violento y fascista. Puede que en la decisión de las empresas que dieron fin a la tribuna digital del ex mandatario estadounidense haya una cuota de justicia. Pero también, el accionar de los CEO’s que dieron la orden, es una señal más que evidente de poderío. Un mensaje al mundo entero que debe ser leído como voz de alerta, fundamentalmente, por los medios de comunicación que hoy se valen de las redes sociales para poner a circular sus noticias.

La aceptación y el manto de santidad con el que cuentan las redes sociales le permiten hacer efectivo un acto de censura y que éste sea visto como una acción justiciera. O la víctima es demasiado repudiable o nuestra ingenuidad nos hace ver a su verdugo como un Robin Hood digital. O también pueden darse ambas cosas. 

Si estas empresas pueden acallar a un ex mandatario (y de un país como Estados Unidos) quiere decir que de ahí para abajo, en la escala de poderes, pueden hacerlo con quien se les ocurra. Cuando el contenido no les parezca el indicado pueden censurar bloqueando cuentas o, de forma más velada, moderando los contenidos.

Los me gusta y la cantidad de seguidores son la moneda con la que hoy se comercializa la aceptación socialCómo nos manipulan en las redes sociales. Impactante charla de Santiago Bilinkis

La seguridad de la información en los medios digitales

En el último tiempo las redes sociales se han vuelto un medio de comunicación en sí mismas y eso es un error grave por parte de quienes emprenden proyectos de comunicación digital. No hablamos aquí de los grandes periódicos que utilizan las redes sociales para acercar usuarios a sus sitios web, sino de aquellos medios más pequeños que deciden comunicar su contenido sólo mediante redes sociales; ya sea Facebook, Instagram, Twitter o cualquiera de ellas.

¿Cómo afecta el bloqueo en las redes sociales de Trump, a la circulación de la información en el mundo? 

Quizás sea oportuno inaugurar el debate en torno a la idea de hasta dónde un medio que sólo publica sus artículos en redes sociales puede hacerlo de manera segura y ejerciendo la libertad de prensa y de expresión si las empresas responsables de esas redes controlan, moderan o censuran los contenidos.

En tanto siempre es necesario recordar, cómo lo señala una reciente publicación de Blog de Medios, que 

Cada plataforma tiene su objetivo (...) Las redes sociales fueron desarrolladas para acerca audiencia a los portales de noticias, no para convertirse en el periódico en sí mismo. Dentro de ellas somos tan sólo un usuario más y por eso es también preciso buscar cómo diferenciarnos. Contar con una identidad por fuera de las redes sociales es una de las formas de aumentar tu credibilidad cómo medio y otorgar mayor seguridad a tu trabajo profesional para no correr riesgos, sesgos o censuras de terceros.

Las nuevas políticas de WA no se aplican en la UE.Nuevas políticas de WhatsApp y el paraguas legal de la Unión Europea

En el artículo “El poder de las redes sociales y porqué es importante montar tu propio sitio web” este portal señala que

es adecuado que un periódico digital cuente con un perfil en redes sociales, pero previamente conviene concretar un sitio web propio. (…) un sitio web brinda seguridad y seriedad a tu periódico.

Las políticas de privacidad o condiciones de uso de las diferentes redes sociales pueden cambiar de la noche a la mañana, como viene quedando demostrado en los últimos hechos que se dieron a conocer. El más significativo de ellos, las modificaciones llevadas a cabo por WhatsApp. Pero ello no debería interceder en el contenido que se propone dar a conocer un proyecto periodístico digital, si podemos ejercer cierta soberanía sobre la plataforma en la que comunicamos. Esta es la única vía posible para conservar la libertad de expresión y evitar ser víctimas de cualquier acto de censura por parte del poderío tecnológico que hoy parece manejar los hilos del mundo.

Te puede interesar
Lo más visto