Cómo eliminar la corrupción estructural, imperdible charla del periodista Hugo Alconada Mon

En los "sótanos del poder" donde trabaja Hugo Alconada Mon, abogado y periodista, “se definen algunos de los asuntos más graves y sensibles de la vida institucional de la Argentina, de los últimos 25 o 30 años.”

¿Por qué existen estos “sótanos”? Las mismas leyes que rigen el mercado, se aplican en este caso: hay oferta porque hay demanda. 

Alconada Mon señala que hay un “pecado original” que sostiene la existencia de estos “sótanos del poder”: el financiamiento de la carrera electoral. La competencia por los cargos políticos no se sostiene de otra manera. 

Este es uno de los “los secretos más incomodos del poder”, ya que en los “sótanos del poder” es donde se mueven los llamados delincuentes de cuello blanco, “los expertos en la corrupción, el lavado, el narcotráfico, el fraude corporativo.”

Todo aquel que quiera competir por la presidencia o llegar a la Casa Rosada va a necesitar 100 millones de dólares. Si querés competir para intendente de Escobar o La Plata, necesitás entre 500 mil dólares y un millón. Comprar tu puesto para el tercer lugar en una lista de concejales de una ciudad mediana, cuesta 100 mil dólares.

Y esta no es una información confidencial, según afirma Alconanda Mon:

Lo saben los políticos, los empresarios, los narcos, lo saben todos. Como lo saben también los organismos de control que debieran controlar.

Se calcula que el 90% de dinero que se utiliza para llevar adelante una campaña política es en negro. Sería imposible recaudar esa fortuna de dinero y cumplir con las legislaciones vigentes. Esto lleva a que los candidatos necesiten “cash y valijeros”. 

¿Quiénes son los que ponen el dinero para las campañas políticas? Primero los empresarios. 

“Y no solamente los empresarios. La policía muchas veces prepara bolsos con la recaudación y los entrega para generar un compromiso de ida y vuelta: ahora yo sé que vos sabés. Y los narcos cada elección están llegando más lejos y más alto.”

Esto que vemos en la política se encuentra dentro de un entramado mucho mayor, Hugo Alconada Mon indica que

Hay muchas comisarias que se licitan, se rematan, se subastan. Se las queda el comisario que ofrezca más dinero. Del mismo modo, hay muchos periodistas que no informan, cobran por su silencio. Hay fiscales que no investigan, cajonean expedientes. Hay jueces que se encargan de prescribir los expedientes. Empresarios que no compiten, se cartelizan. Sindicalistas que entienden clarísimo la premisa básica de que no hay mejor huelga que la que no se hace, pero te permite negociar.

Existe un entramado, del que muchas veces sólo podemos llegar a ver la punta del iceberg y que Alconada Mon señala como "el poder permanente". Los funcionarios pasan, pero este poder, que forma parte de ese entramado que habita en los sótanos, permanece y, muchas veces, gobierna por sobre los gobernantes.

"¿Es posible corregir esto? Si. ¿Es difícil? Mucho. El punto de inflexión es cuando los ciudadanos se involucran y empiezan a ejercer presión. Si es posible, pero depende de nosotros."